Por Luis Portillo Pasqual del Riquelme
Ha muerto Javier, Javier Perote, el coronel Perote, mi querido Coronel, luchador y defensor hasta el final de la causa saharaui, querido, respetado y admirado por todos.
¡Qué pena, Javier, que te hayas ido ahora, sin conocer la victoria final del hermano pueblo saharaui, de ese pueblo que tanto amaste y por el que tanto luchaste!
Una victoria ya muy, muy cercana, por la que hubieras llorado de alegría fundiéndote con los miles de traicionados y abandonados con los que compartías las multitudinarias manifestaciones cada 14 de noviembre, reivindicando la anulación oficial y solemne de los infaustos Acuerdos Tripartitos de Madrid, el reconocimiento de la República Saharaui (RASD) y la devolución del Sáhara invadido, ocupado y robado, a sus legítimos dueños, los saharauis.
¡Cómo te vamos a llorar! ¡Cómo te echamos ya de menos! Nos faltan las palabras para expresarlo…
Siempre fuiste un luchador, dando la cara donde fuere, con tu presencia y tu pluma, en los actos solidarios, en tus conferencias, con tu presencia contestataria frente a la tenebrosa embajada marroquí, y en tantos foros y lugares a los que acudiste o a los que no pudiste acudir, siempre en apoyo del Pueblo Saharaui.
Siempre me pareció que tu enorme cuerpo de combatiente y tu lúcida conciencia de militar honesto, valiente y consecuente reclamaban un Ejército merecedor de tal nombre, para expulsar al invasor marroquí de aquellas tierras saharauis tan humilladas y pisoteadas.
Mi último recuerdo fue verte en silla de ruedas, inválido, el primero en la manifestación del 14 de noviembre, delante de la pancarta de cabecera, dirigiendo la manifestación con tu presencia, tu valentía, tu coraje, toda tu dignidad. Dando ejemplo y testimonio, reivindicando la libertad del pueblo saharaui, como reclaman tantos miles de ciudadanos y ciudadanas saharauis desposeídos de sus más elementales derechos, como es el derecho a la autodeterminación de la última colonia de África.
Los presos políticos saharauis, que están muriendo lentamente por esa misma causa en las cárceles marroquíes, te tienen muy presente en su mente y te llevarán siempre en su corazón.
Nosotros seguiremos reclamando su libertad cada lunes ante el Ministerio español de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, hasta que los gobernantes españoles cumplan con las obligaciones que competen a España como potencia administradora de iure del Sáhara Occidental y esos presos -y todo el pueblo saharaui- recuperen su libertad.
¡Descansa en paz, Javier, Javier Perote, coronel Perote!
Sabemos que, desde donde quieras que estés, seguirás apoyando y defendiendo esa causa y acompañando al Pueblo Saharaui en su lucha, que es también la nuestra.
¡Hasta la victoria final, querido coronel, coronel Javier Perote!
Madrid, 25 de septiembre de 2021